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Abrimos al completo

Día 28 de diciembre:

Primer día con un solo cocinero y primer día que abrimos los dos turnos (comida y cena) al completo.

15 comensales en total. Hemos tenido un tiempo de espera de 10-15 minutos para cada plato de la comida (LT).

Nos cronometramos y parece que tenemos que mejorar algunos procesos, ya que algunos segundos han tardado más de la cuenta en salir. Los cocineros han expresado su dificultad para hacer malabarismos entre la cocina y el comedor. Les desconcentra, y tienen que interrumpir la cocción con frecuencia para ocuparse de otras tareas. También creen que necesitan un sistema para controlar los pedidos, ya que tienen que comprobarlos repetidamente. 

Hemos tenido otros contratiempos durante el servicio. No teníamos algunos de los platos que pedían los clientes, ¡incluso hemos servido el plato equivocado a un cliente! No obstante, todo el mundo coincidía en las encuestas: la comida estaba espectacular.  Vamos en buen camino.

Para analizar mejor la situación, abrimos un A3 para recoger nuestras ideas e identificar áreas de mejora. 

Durante el turno de la cena, la cocinera se ha sentido cómoda gestionando los pedidos y el número de clientes. Ha agradecido el apoyo prestado por la barista, que le ha permitido centrarse en cocinar sin interrupciones. Sin embargo, también opina que necesitamos un sistema mejor para llevar la cuenta de los pedidos ya servidos. 

Estos son los comentarios de los cocineros del día:

  • La experiencia en general ha sido positiva. Obviamente hay aspectos a mejorar.
  • En primer lugar, la cocina carecía de un etiquetado adecuado para los ingredientes y las herramientas. Esto dificulta la localización de determinados elementos, ralentizando el proceso de preparación.
  • No estaba claro dónde debían guardarse ciertos objetos, lo que desordenaba los espacios de trabajo.
  • Otro problema ha sido la falta de reloj o temporizador para la preparación. Esto obligaba a mirar constantemente la hora en el móvil, lo que distraía de la tarea que se tenía entre manos. Un simple reloj habría sido un complemento útil para la cocina.
  • Por último, no había procedimientos de limpieza establecidos, por lo que se tarda más de la cuenta en limpiar el espacio al final del turno.

En general, hemos aprendido mucho en nuestro primer día con una sola persona en cocina y la comida ha salido realmente buena. Hay aspectos que se pueden mejorar para promover un flujo de trabajo más eficaz y organizado. Los hemos identificado, y nos comprometemos a mejorar aún más nuestro servicio.

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